__________________________
Don Benzi, un habitante de Badiraguato, tierra de donde es originario el capo sinaloense, Joaquín Guzmán Loera, narra su historia para el periódico El Debate sobre lo que vivió cuando en un tiempo trabajó para “El Chapo” Guzmán en la sierra de Badiraguato.
Con voz ronca y con equivocaciones en las fechas debido a la poca memoria que le queda, pero como si hubiera sido ayer nada cómo fue su experiencia con Guzmán al trabajar con él. El capo que es considerado por el gobierno de Chicago, en Estados Unidos, como el Enemigo Público Número Uno y que ahora está preso en Nueva York.
__________________________
¿Ya no va a trabajar al monte?
No, ya no puedo.
¿Cómo era su vida en la sierra?
Vivimos muy a gusto, gracias a Dios, cuando estábamos con los padres vivos, cuando estaban fuertes. Nosotros nos criamos en el monte, trabajando, sembrando y ‘taspanando’.
¿Y a usted le tocó ir a las siembras de “El Chapo”?
Sí. Estuve en varias siembras. Anduve nomás de jod… Mi negocio con él era negocio pesado, pero como lo sabía hacer no se me hacía pesado, lo sabía hacer. Era hacerle leña a la gente que trabajaba con él, era pa’ la gente que hacía los sembradíos. Yo a esa gente le llevaba leña pa’ que hicieran comida, fueran mujeres o fueran hombres.
¿Cuántos años tenía usted?
Cuando fui pa’ allá, pues te voy a decir que tenía como unos 45 o 50.
¿Y ahora se volvió a escapar? ¿Será cierto?
Yo vi la tele, y salió varias veces, nunca había salido tanto como ahora. Yo estuve viviendo allá arriba cuando se escapó mucho tiempo.
¿Hace cuánto tiempo?
Pues como 8-10 años.
__________________________
¿Cómo se portó él con usted?
No pues él se portó muy bien, bien, bien se portó “El Chapito” conmigo, pa’ qué voy a decir lo contrario. Me quiso mucho. Nomás que uno no sabe trabajar, no sabe cuidar, pero sí se portó bien conmigo.
Me hizo muchos regalos, hasta me regaló una camioneta. Nomás que a nosotros qué nos van a durar esas cosas, lueguito le dimos en la torre. “Le hablé -me dijo- pa’ que viniera pa’ regalarle una camioneta”. ¿Cómo va a ser eso?, le dije. Me quería regalar una camioneta del año y no quise yo. Le dije: “Una camionetita secundaria, nomás que esté buena”. Y entonces me dio una camioneta que le compró a su mamá. Era camioneta buena, grande.
¿Antes no había tanta necesidad, o sí?
Pues cuando andaban esos hombres fuera no había tanta necesidad pa’ la sierra.
¿Le tocó ir a alguna fiesta con él?
Una vez me invitó a una boda. Dijo: “Me invitaron a mí y yo lo invito a usted”. Yo creí que era por aquí cerca, en la costa, y no, era pa’ la quinta chin… acá pa’ la sierra, pa’ Guadalajara, o a un ladito. Hasta allá fuimos a dar. Los compadres de los novios eran de aquí de Sinaloa, muy camaradas de “El Chapo”, eran “El Chapo” Caro, hijo de Gil Caro.
¿Es cierto que vendía naranjas?
Eso no te sé decir yo. Mira, lo que sí sé es que su mamá era panadera, y él lo ‘corretiaba’ por los ranchos, lo vendía alrededor de su casa, porque doña Consuelo hacía el pan y él lo correteaba por los ranchitos. Lo de las naranjas no sé.
__________________________
Información proporcionada por El Debate.
0 Comments